Horrores en plataformas digitales

Y luego hay quien me pregunta por qué sigo comprando CDs.

Escuchad "Nightline New York" de Joachin Kühn, Michael Brecker, Eddie Gomez y Billy Hart en Apple Music y me contáis.+

No se si en Spotify estará igual de mal. Sospecho que sí.

Y de paso a ver si coincidís en mi diagnóstico. (La respuesta mañana si alguien contesta).

En Spotify: infumables los bajos. Son una agresión emborronada en bucle. A partir de ahí el resto no me ha interesado.

Ya veo que algo parecido.

Tengo esa grabación en CD y, aunque la compresión sea demasiado ordenadita para mi gusto (todos los niveles encajados en su sitio de manera un poco artificial en mi opinión) suena bien. Aunque, claro, se masterizó para vinilo que, digan lo que digan las malas lenguas, tiene menos gama dinámica.

Por lo que veo los muy bestias de la discográfica han cogido el máster analógico y lo han volcado directamente a digital sin decodificar la reducción de ruido (dbx imagino por lo salvaje de la compresión). En mi caso lo que más me horrorizaba son los platos. La compresión en altas frecuencias hace que parezca estar lloviendo.

Yo lo siento compañeros pero el streaming no es para mi, y me alegro de haber llegado tarde. Sigo comprando cedes, no tantos como antes, porque creo que con mis mas de dos mil referencias de jazz mas dos terabytes en formato FLAC almacenados no me queda tiempo suficiente para tanto Jazz.

Tampoco quiero pasarme. En el tiempo que llevo escuchando música en streaming me he encontrado dos o tres casos, no más.

Pero vamos, se ve que hay discográficas que no entienden el formato. O que han encargado "al informático" que suba los archivos.