La verdad, la mentira y el mundo

Hola  

Cuenta una leyenda que un día la Verdad y la Mentira se encontraron cerca de una gran fuente. La Mentira vio que la Verdad era hermosa y autoritaria en su ropaje magnífico. Lo pensó por un momento y dijo: "¡Hoy es un día maravilloso!"  La Verdad miró hacia el cielo y suspiró porque el día era realmente hermoso. En ese momento, la Mentira dijo la Verdad: "¡Mira esta agua, se ve fresca y clara, vamos a bañarnos juntas!"

La Verdad lo pensó y concluyó que no estaría de más darse un baño, palpó el agua y comprobó que efectivamente era muy refrescante y placentera. Así que ambos se desvistieron y comenzaron a bañarse disfrutando del momento. Pero de repente, la Mentira salió sigilosamente del agua, se puso la ropa de la Verdad y salió corriendo comenzando a caminar en los zapatos de la Verdad. Todos la admiraban y solo unos pocos la miraban con recelo.

Cuando la Verdad se dio cuenta de lo que había pasado, furiosa, salió de la fuente y corrió detrás de la Mentira para quitarle la ropa, estaba completamente desnuda porque nunca jamás usaría la ropa de la Mentira. Pero el Mundo, al ver la Verdad desnuda, estaba avergonzado y horrorizado por su desvergüenza y apartó la mirada de ella con ira y desprecio.

La pobre Verdad finalmente se escondió en un pozo y desapareció de la vista de la gente. Así fue que, desde entonces, la Mentira ha dado la vuelta al mundo disfrazada de Verdad, satisfaciendo las necesidades de la sociedad, mientras que la Verdad debe ser buscada.

Esta antigua historia, que me contaron de niño y de la que también se pueden encontrar varias versiones en Internet, subraya la amarga realidad: el hecho de que la mayoría de las personas están más dispuestas a aceptar 'una buena mentira' que 'la verdad desnuda'. Mentir es fácil y te permite sentirte parte de la multitud.

La verdad, por el contrario, cansa. Hay que buscarla con determinación. Requiere profundización, estudio, valentía y exige que estemos dispuestos a luchar. Primero internamente, dentro de nosotros, luego también afuera, en el mundo, porque quien dice en voz alta una verdad incómoda es sistemáticamente ignorado o denigrado, cuando no aislado, odiado y eliminado. Siempre ha sido así en la historia. Y siempre lo será.

La elección sigue siendo nuestra: vivir como ignorantes, o peor aún, como cómplices, o convertirnos en buscadores. Y este es un arduo trabajo individual que al final puede llevar a cuestionar muchas certezas. Pero también es una gran oportunidad de crecimiento.

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"La verdad desnuda sale del pozo", óleo sobre lienzo de 1896 del artista francés Jean-Leon Gerome, una mujer desnuda y gritando sale de un pozo. Representa, en efecto, la Verdad que sale del fondo de nuestra conciencia y está armada con una especie de látigo para despertarnos y sacudirnos.

Por Valentina Bennati.  -https://comedonchisciotte-org.translate.goog/la-verita-la-menzogna-e-il-mondo/?_x_tr_sl=auto&_x_tr_tl=es&_x_tr_hl=es&_x_tr_pto=op

Saludos cordiales.

No conocía esa leyenda, es muy bonita y también cierta. Y ese cuadro de La Verdad desnuda es precioso.

Dicen que un día Diógenes decidió masturbarse en el ágora, lo que provocó que lo tacharan de pervertido.
«Nos da vergüenza contemplar a un hombre masturbándose en el Ágora, pero no la sentimos ante la corrupción que se produce allí»

Al que dice la verdad suelen partirle la cara el primero.

Saludos