MADRE DESESPERADA EL PRIMER DIA DE VACACIONES

Una madre confiesa estar desesperada tras el primer día sin colegio de sus hijos: «Tener a los niños en casa es una tortura»

«Se acaba de ir mi marido a trabajar y le he dicho 'es que no puedo más', me he echado a llorar en la cama, están todo el rato peleándose, es que no hay quien los entretenga, es que solo saben entretenerse con consolas o con tablets y yo no quiero darles la consola desde las ocho y media de la mañana».

MADRE DESESPERADA

Esta mami podría darles un cepillo de los dientes y ponerlos a fregar el suelo todo el día con él, verá como no se aburren.

Cuando yo iba al cole no tenía consolas ni tablets, ni teléfono movil, no tenía ni juguetes porque los Reyes Magos no paraban en mi casa.
Y nunca me aburría ni tampoco estaba en casa dando por saco, apenas se descuidaban me escapaba y me iba al campo a buscar nidos, cazar lagartijas o cualquier cosa que se menease, o a jugar con los amigos a los chavos, con la trompa, nunca nos aburríamos.

Saludos

Tal cual

Resulta curioso que se queje de que se aburren sin la tecnología y ella sea la primera que lo airea precisamente haciendo uso de ella . No he leído más allá del titular pero la frase 'esta madre influencer...' ya me ha bastado. Esto es prensa amarilla 2.0. Las mías no se aburren en vacaciones eso seguro...

Saludos!

Hoy, en la calle, ya no se puede ser un gamberro a la antigua usanza. En los 80 con mi pandilla comprábamos unos petardos llamados chupinazos que se encendían con papel de lija y tanto te reventaban una papelera como una lavadora vieja dejada al lado de un contenedor.
Poco después con nuestros skates dejábamos los bordillos de las aceras, bancos de madera y barandillas varias finas a base de rozamientos y ostiazos varios. Y nos sentíamos artistas. Y los vecinos desde la lejanía nos odiaban, pero al menos no estábamos encerrados en un piso dando la murga a propios y extraños.

Saludos

Totalmente identificado, has descrito mi juventud

Pepe, somos de la generación pre-casi todo, no tuvimos televisión hasta los 7 u 8 años como poco y cuando la tuvimos precisamente para niños mucho no había, con 15 minutos de dibujos y los telerines ibamos que chutábamos, los fines de semana algo más pero tampoco mucho, no podíamos estar todo el día pegados a la pantalla sencillamente porque por las mañanas no había emisión, conectaban a medio día y después de la novela volvían a desconectar hasta las 7 u 8 de la tarde y por supuesto a las 12:00 El Alma se Serena, Bandera e Himno. Teníamos para nosotros la calle y era básica la pandilla de amiguetes, una cuerda, piedra redondeada, trompa, chapas, canicas y una pelota (balón los días de días) eran más que suficientes para pasarlo de miedo, no nos aburriamos y se nos hacían cortos los días sobre todo en vacaciones, nuestra videoconsola, tablet ... eran los tebeos que intercambiabamos entre nosotros y que por un módico precio podíamos "recambiar" en los kioskos, el ratón para nosotros era un animalillo con rabo que cazábamos con fruición.

Nos ha tocado vivir un buen pedazo de una dictadura, el nacimiento de una democracia, su consolidamiento, un golpe de estado de libro con "bigotes" incluidos, el destape, una Expo Universal, una Olimpiada y un Mundial de Fútbol, el advenimiento de la tecnología con ordenadores, moviles inteligentes e internet, ahora cuando comenzamos la cuesta abajo nos amenazan con Inteligéncias Artificiales y robots, lo único que a permanecido constante es la posibilidad de que de un plumazo nos borren de la faz de la Tierra unos inconscientes con botón nuclear.

Yo veo a los niños de ahora y sinceramente no me cambiaría por ninguno de ellos.

Saludos.

En los 80 el tema de los videojuegos en los hogares era un coñazo. Los cartuchos de las consolas Atari cargaban rápido pero como tuvieras un Spectrum o un Commodore 64, entre otros, esperar media hora o mas a que se cargara un Tetris o Dual Combat te exigía una paciencia infinita. Para eso estaban los salones recreativos en donde todas las máquinas tenían su apoyador para el cigarro aun sabiendo que la gran mayoria de usuarios eran menores de edad.
Y lo mas importante, seguíamos estando fuera de nuestras casas dando la tabarra en otro lado.

No necesitábamos más que un par de trozos de palo para hacernos un "pique y pala" y hala todos a jugar.
Yo estaba mejor en la calle que en casa porque no paraba, si estaba por casa hacía experimentos ...
Un día hice una silla eléctrica y pasó mi madre por alli, a vigilar un poco, y me preguntó, ¿y eso qué es?
Eso es una silla eléctrica le dije. Se quedó mirando el invento y no la ví muy convencida, pelé un cable y lo dejé caer encima de la instalación para que viese como funcionaba. ¡Vaya si lo vió!, pegó un petardazo el cierre que hice y desde el enchufe donde tomaba la corriente hasta la acometida del contador se pegó fuego toda la instalación.
Y cuando se enteró mi padre pues eso repaso al canto.
Yo era más o menos como el Periquín.

Saludos

Parece ser que la juventud, en los 80, lo teníamos todo en lo que se refiere a libertad para 'ser uno mismo'. Y desde un punto de vista popular, también la mejor música.
Hoy dia pongo los 40 principales y a los 2 minutos me quiero suicidar.

Saludos

Pipiolos, que sois unos pipiolos...

Un saludo

"Hoy dia pongo los 40 principales y a los 2 minutos me quiero suicidar."

Yo con esa bazofia vomitaba hace ya más de 45 años.....por eso no la escuchaba bajo ningún concepto, mera subsistencia ¿melómana?.......

Supongo que desde hace unos años (los del reguetón y engendros aún peores) seguramente me llevaría a "abrir el gas y respirar hondo".....

Salut

¡¡¡Se me olvidaba!!! los cines de verano, el HBO de nuestros tiempos, dos películas, sillas incómodas donde las haya, bocata de atún con aceitunas rellenas (con hueso sería de malajes), Mirinda, bolsa de pipas king size y ¡como no! los amiguetes, una o como mucho dos veces por semana que la cosa no daba para más.

Saludos.

El cine de verano

Una de las sensaciones más relajantes es recordar cuando apoyaba la cabeza sobre el regazo de mi madre y me quedaba adormilado en las infumables películas nocturnas. Y ese olor a jazmín.

Salud

Observo que sois muy jóvenes.
En Sigüenza, la televisión llego sobre el año 1958, pero se veía muy mal. Algunos días, todo nieve.
En el año 1961, mejoro la recepción, ya que subieron la potencia en el emisor de "LA BOLA DEL MUNDO" en Navacerrada.
Pues ese año, entro la tele en casa.
Los telediarios con los rostros de Jesús Álvarez y David Cubedo.
"LOS VIENESES": Herta Frankel, Arthur Kaps, Franz Johan, Gustavo Re.
El "ESTUDIO 1". Toda la familia en silencio.
Las variedades del sabado noche, con Rafael Ibarbia al frente de la orquesta.
El "UN DOS TRES...".
"CRONICAS DE UN PUEBLO".
Y a las 12 de la noche, "VERSOS A MEDIA NOCHE", "MOMENTO MUSICAL" y "RECUERDA". "Bandera , escudo e himno nacional".
En fin... La televisión, nos abrió al mundo. La radio, la recuerdo desde mis primeros días y gracias a ella, que emitía mucha música clásica, me aficione. También me influyo mi padre, que era un gran aficionado a la zarzuela -teníamos un tocadiscos GRUNDIG-.

En mis años más infantiles, no disponíamos de ningún tipo de tecnología -tampoco la había-. La pandilla, teníamos nuestro cuartel general en una cueva del pinar.
Cuando llegaban "Los Reyes", nos dejaban juguetes que duraban y duraban. Incluso entre las clases más pudientes, no era normal que nos compraran caprichos en cualquier momento.
Uno de los juegos más peligrosos, era el lanzamiento de botes con carburo. Los de cinco kilos -con buena carga-, llegaban a una altura de 50 m.
También elaborábamos pólvora y hacíamos algunos inventos eléctricos.
Por la noche y al salir del colegio, bajábamos a la estación a ver los trenes.
Durante una temporada,  anduvimos buscando armas de la G.C., que había por los desvanes, almacenes... Sigüenza fue un frente muy duro en la G.C., por lo que se encontraba de todo.
No eras nadie, si no ibas al colegio con alguna bayoneta, pistola o cualquier otra arma -yo tenia un revolver del 6,35-. Nuestros padres, que se percataron de nuestras actividades, se lo contaron a la Guardia Civil y en dos días nos desarmaron. Sin más problemas.

Bueno. Pues sin tantos artilugios, éramos muy felices, muy creativos y nos conformábamos con muy poco.
Aprovechabamos cualquier fiesta, para ir a merendar al campo.
Y ya con 13 o 14 años, la pandilla se componia de chicas y chicos. Los jueves y domingos, acudiamos al cine. Y por supuesto que empezamos con los guateques. Yo me heché una novia en esa pandilla y todavía estamos juntos. Y es que en aquellos años, las cosas rotas se arreglaban, en la actualidad, son de usar y tirar.

Y tengo que decir que con esa forma de vida, fui muy feliz. Al igual que todos mis amigos.

Con 15 años ya íbamos a los bares "de música" a tomar cervezas y ver que ponía el dueño, por suerte era gente "mayor" que en los 80 ponía cosas de calidad, descubrir a los CCR o Dereck&te Dominos, Led Zeppelin, y que el tío te explicase quienes eran y fíjate que hacen ahora y tal y tal... Buena juventud pasamos sí. Respecto a hacer el gamberro, pues moderadamente, cualquier municipal podía darte una hostia por listo y en casa te daban otra por tonto.